Guerra Absurda

Eso es lo que pasa entre Pepu y Pepe, Pepe y Pepu. Un rabieta de niños que no beneficia a nadie y sólo perjudica lo que más importa, que es el equipo de baloncesto nacional.

Ya son mayores los dos para poder comportarse de manera educada hasta que terminen los juegos y después no volver a hablarse en toda la vida si quieren, o ir al Diario de Patricia a resolver sus diferencias.

No tengo favoritos, ni creo que uno tenga la culpa más que el otro, me parece que los dos lo han hecho de maravilla en sus respectivos cargos y que ahora estan empañando la preparación a la cita más bonita e ilusionante del deporte mundial, los juegos olímpicos.

Los únicos que acabaran perdiendo seremos nosotros, los aficionados, porque si esto sigue así la preparación va a ser un infierno y el equipo lo notara en Pekin. Que pena que pase esto, cuando tenemos al mejor grupo de jugadores de la historia del baloncesto español y aspiramos a todo.

Que les den un chupete a los dos y se dediquen a trabajar para que ganemos una medalla, después podrán tirarse los trastos a la cabeza cuando quieran.